Aunque hayamos oído hablar de la
pentaplejia menos que de la
hemiplejia, la
paraplejia o la
tetraplejia, eso no autoriza a cometer el error de escribir *
pentaplégico con
g, como aparece en este titular de prensa.
En descargo del periódico hay que decir que a las pocas horas recobró la cordura ortográfica, y el titular ha sido debidamente enmendado.
2 comentarios:
De todas formas, Romera: ¿No es raro que un paralítico sea un parapléjico; cuando lo es más, un tretrapléjico; y si le falta el aire que respiramos 13 veces por minuto, sea un penta…?
Explícanos eso, por favor. Las dos primeras extremidades son las piernas, que le hacen parapléjico; las siguientes, que le hacen tetra, son los brazos, las manos…; y los pulmones hacen la quinta parte. Me ahoga esta situación.
Y además, ya casi no oigo.
Sí, aparte de la incorrección ortográfica del titular, la denominación "pentapléjico" plantea algunos problemas semánticos. Los pulmones no son unas extremidades como los brazos y las piernas, así que en rigor no se podría hablar de "penta-" sino buscar otro término. Aparte de eso, si los pulmones son dos, ¿por qué no "hexa-"? Sin embargo parece que en medicina ya se admite la palabra. Bueno, los tecnicismos pertenecen a un mundo aparte.
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