16 de julio de 2006

QUIJOTESCA


«La lucha contra el narcotráfico ha cobrado dimensiones quijotescas». Así se expresaba la pasada noche María Casado, presentadora del Telediario 2 de TVE1, al comentar una noticia relacionada con las drogas. En el aeropuerto de Bogotá la policía había descubierto unos cuantos kilos de cocaína escondidos en el interior de una escultura que viajaba de Medellín a Madrid. Como la pieza era un busto de don Miguel de Cervantes, debió de creer la locutora que usando el adjetivo «quijotesco» se anotaba un punto en ocurrencia.

Se supone que quiso decir dimensiones estrambóticas, o ridículas, o grotescas. Pero no es eso lo que significa «quijotesco». El DRAE no lo pone fácil. Va uno en busca de la palabra, y encuentra esto:

quijotesco, -a.- Lo que se ejecuta con quijotería.

Hay que saltar, pues, a quijotería, donde puede leerse:

quijotería.- Modo de proceder de un quijote.

Lo cual tampoco aclara gran cosa y obliga a consultar el significado de quijote como nombre común. Helo aquí:

quijote.- Hombre que antepone sus ideales a su conveniencia y obra desinteresada y comprometidamente en defensa de causas que considera justas, sin conseguirlo.

Es decir, que María Casado rozó la apología de los narcotraficantes: unos quijotes, comprometidos con nobles causas, entregados a sus ideales.

Al menos en una cosa acertó. La definición de «quijote» en el diccionario académico acaba diciendo «sin conseguirlo», y es evidente que los camellos descubiertos no consiguieron su objetivo. Pero me temo que esto no es suficiente para hablar de dimensiones quijotescas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Keep up the good work »