11 de junio de 2009

Tramas y trabas


Una trama es mucho más novelesca que una traba, dónde va a parar. La historia de El Pocero no podía terminar con una simple retirada por motivos administrativos (llamémosles trabas). Al cambiar una sola letra, el caso del constructor enriquecido merced a la especulación inmobiliaria se transforma en un oscuro suceso donde la heroica víctima sucumbe a la conjura de los poderes malignos (o sea, a las tramas). ¿Estará el bueno de Urdaci detrás de todo esto?
(La noticia, en El País)